miércoles, 8 de octubre de 2014

Buscando a Alaska, John Green.

Hace poco os hablé de algunos libros que quería leer, entre ellos "Buscando a Alaska" ya lo leí y sé que volveré a releerlo. Es un libro muy ligero y fácil de leer, es decir que tampoco se tarda mucho (aunque yo no puedo dejar de leer cuando empiezo). El libro me encantó y no me ha decepcionado en ningún sentido, pero me ha sorprendido por que con el título y la descripción yo preconcebí una idea que no es exactamente esa.



Y como buen libro me ha hecho pensar en algunas cosas:

Cuando Miles comienza la vida en su nuevo instituto la primera regla es "nunca delates a nadie" si te hacen algo no debes contarlo a los profesores, las cosas se solucionan entre los alumnos. Si bien ellos lo solucionan a base de "bromas" o "gamberradas", lo cierto es que las cosas siempre deben solucionarse entre los implicados. Creo que es mas fácil intentar solucionar las cosas con uno mismo hablado con los demás que implicar más gente, por que sino el problema se va haciendo más grande.

Habla de la lealtad, de confiar ciegamente en una persona que es tu amiga, que como todos ha cometido sus errores y tal vez eso te ha hecho desconfiar, pero aún así vuelves a confiar y no te decepcionan. Es muy importante poder confiar en tus amigos y ser leales a ellos, no delatarles o darles la espalda a la mínima de cambio, yo soy de las que creen que las personas merecen una segunda oportunidad y más si son tus amigos (a no ser que lo que haya hecho sea MUY grande) y en el libro queda muy bien reflejado.

Habla de la pérdida y el dolor, ¿Cómo nos enfrentamos a la pérdida? ¿Cómo reaccionamos cuando alguien sale de nuestra vida? A veces nos deprimimos, otras sentimos furia y también a veces nos volvemos tremendamente egoístas con el dolor, creemos que nadie puede conocer a una persona como la conocemos nosotros. Y seguramente tengamos razón, ya que nadie conoce igual a una misma persona. Pero deberíamos preguntarnos si de verdad la conocíamos, no digo que fuese falsa ni mucho menos pero creo que es imposible saberlo todo de una persona, y tal vez eso es lo que más nos duele cuando se van por que queremos conocer.

Y con lo anterior también habla de la muerte, de lo rápida y sorpresiva que aparece a veces, de como reaccionamos cuando lo hace y de todos los interrogantes que deja a su paso. ¿Y si tal persona no hubiese muerto? ¿Qué hubiese sucedido? ¿Que ocurre con todo lo que habíamos planeado juntos? ¿Dónde se van todos los momentos? por que llega el olvido, y no me refiero a que a los dos días o mas se te olvide que existió, no. Pero llega un momento que no puedes recordar su rostro con nitidez, ni los hoyos que se formaban en cada lado de su labio cuando sonreía, si le brillaba mas o menos el pelo, el perfume de su cuello, etc...

Y finalmente habla del perdón, es muy importante perdonar y que te perdonen, pero sobretodo perdonarse a uno mismo. A menudo tenemos el problema que al cometer un error empezamos a machacarnos, ya no es lo que puedan decirnos los demás, sino que nosotros mismos pensamos "¿Por qué he hecho tal?" y cosas así, tenemos que perdonarnos para avanzar.



Ahora para acabar dejaré algunas de las frases que más me gustaron:

"Este tipo —dije de pe en el umbral de la sala—, François Rabelais, era un poeta y sus últimas palabras fueron:«Voy en busca de un Gran Quizá». Ese es el motivo por el que me voy. No quiero esperar a morirme para empezar a buscar un Gran Quizá."

"Porque no puedes prolongar estas cosas para siempre. En algún momento, te quitas la tirita y te duele, pero luego se te pasa y te sientes aliviado."

"Me volví, pero no había nadie. Luego miré al otro lado y Alaska me estaba sonriendo, el entrecejo y la sien arrugados, convertidos en un estallido de estrellas."

"Tiene una vida entera para reflexionar sobre la doctrina budista de la interconexión. —Pronunciaba cada frase como si la hubiera escrito, memorizado y ahora estuviera recitando—. Pero mientras miraba por la ventana, perdió la oportunidad de explorar la creencia budista, igual de interesante, de estar presente en cada momento de su vida diaria, de estar verdaderamente presente. Estar presente en clase. Y luego, después de que haya terminado, estar presente allá fuera."

"—A veces no te entiendo.
Ni siquiera me miró. Se limitó solo a sonreír al televisor.
—Nunca me entenderás. De eso se trata."

"Vagamente recuerdo la sonrisa de Lara desde la puerta, la relumbrante ambigüedad de la sonrisa de una chica que parece prometer una repuesta a la pregunta, pero que nunca la da. La pregunta que todos nos hemos estado preguntando desde que las niñas dejaron de resultarnos repulsivas, la pregunta que es demasiado complicada de simple que es: ¿Le gusto o no le gusto?"

"Cinco capas de tela, y aún así sentí la calidez nerviosa del roce, un reflejo pálido de los fuegos artificiales de una boca sobre otra, pero un reflejo al cabo. Y en la fugacidad del momento, me importó al menos lo suficiente. No estaba seguro de si me caía bien y dudaba si confiar en ella o no, pero al menos me importaba lo suficiente para tratar de averiguarlo. Ella en mi cama y sus grandes ojos verdes mirándome con detenimiento. El misterio perdurable de su sonrisa traviesa, casi burlona. Cinco capas nos separaban."

"Así tal cual. De cien kilómetros por hora a dormirse en un nanosegundo. Yo quería acostarme junto a ella en el sofá, abrazarla y dormir. No follar, como en esas películas. Ni siquiera practicar sexo. Solo dormir juntos, en el sentido más inocente de la expresión. Pero me faltaba valor, y ella tenía novio, y yo era torpe, y ella era preciosa, y yo era un aburrido sin remedio, y ella era fascinante hasta el infinito. Así que regresé a mi habitación y me dejé caer sobre la litera, pensando que, si las personas fueran lluvia, yo sería llovizna y ella, un huracán."

"El mejor día de mi vida todavía no ha ocurrido. Pero ya sé cuál es. Lo veo todos los días."

"Llega un momento en el que nos damos cuenta de que nuestros padres no se pueden salvar i salvarnos a nosotros, que a todos los que navegan por el tiempo, tarde o temprano, la corriente los arrastra hacia el mar, y que, en pocas palabras, todos nos vamos."

"¿Cuánto dura un instante?¿Un segundo?¿Diez?¿Qué diablos es «al instante»? Nada es instantáneo."

"Quizá era que Alaska no podía poner el freno y yo no podía apretar el acelerador."

"Ella había personificado el Gran Quizá, me había demostrado que valía la pena dejar atrás mi pequeña vida por una más amplia, y ahora se había ido llévandose consigo mi fe en el quizá."

"Una mujer fuerte que hace arder el cielo e inunda el infierno."

"Yo no era religioso, pero me gustaban los rituales. Me gustaba la idea de relacionar una acción a la memoria."



Algunas frases tal vez carecen de sentido, pero es difícil quedarse con una frase, no es que haya muchas, es más bien el momento. Creo que en el libro hay momentos muy geniales.

Y para que penséis un rato os dejo una pregunta del libro "¿Como se sale del laberinto?", hace referencia en este caso a los problemas y complicaciones de la vida, no los pequeños sino a los GRANDES problemas.


¿Habéis leído el libro?
¿Que opináis de los temas que toca?
¿Como saldrías tu del laberinto?





3 comentarios:

  1. No he leído el libro, pero por lo que cuentas es posible que me guste!! Además tiene frases chulas, de esas que yo colecciono :D Igual me animo, porque estos libros adictivos que se leen rápido y fácil son geniales al fin y al cabo.
    Un besazo

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    1. Pues si te animas ya me contarás si te ha gustado o no!! Un besazo!

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  2. No hay que pensar cómo salir del laberinto, simplemente hay que hacerlo. Quizá lo más impulsivo posible. A veces pensar excesivamente arruina las cosas. No hay que pensar cómo ni cuándo salir del laberinto, lo sientes, sales y ya.
    He leído el libro, hace bastante tiempo. Voy a releerlo. No creo haberlo entendido completamente, aunque igual no es necesario hacerlo.

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