INGREDIENTES (La cantidad varia según vuestro gusto):
- Dos hamburguesas (por persona)
- Tu queso favorito
- Aceite de girasol
- Sal
- Pimienta negra
- Pimentón rojo
- Curry
- Patatas
- Cebolla
- Pimientos verdes picantes o jalapeños
Primero de todo plearemos las patatas, las limpiaremos y las cortaremos al gusto. Seguidamente mezclamos sal, pimienta negra, pimentón rojo y curry (yo personalmente pongo bastante ya que en el proceso se pierde la mitad), una vez echo esto sazonamos las patatas con las especies y las dejamos reposar.
Lo segundo que haremos será sazonar las hamburguesas con sal y pimienta negra (al gusto, como siempre). Cortamos queso (yo he puesto bastante) y lo colocamos en el centro de una de las hamburguesas, seguidamente colocamos la otra hamburguesa encima y aplastamos los lados de ambas hasta que queden bien unidas. Ponemos aceite en la sartén y lista para freír. También podéis torrarla, si lo preferís.
Si queréis para no dejarlo para lo último podéis utilizar otra sartén y freír las patatas. Mientras, cortad cebolla y jalapeños.
Cuando la hamburguesa esté en su punto tirad la cebolla y el jalapeño en la sartén (para este paso yo quito el aceite pues no lo necesita). Y a parte torramos pan de hamburguesa.
Finalmente cuando todo esté listo, colocamos la hamburguesa encima del pan, la cebolla con jalapeño encima (y mayonesa, si queréis). A partir de aquí solo podéis disfrutar. Las patatas están super buenas y la hamburguesa ha sido la mejor de mi vida por que notabas todos los sabores mezclandose; el de la cebolla, el punto picante de los jalapeños, el sabor dulce del queso derritiendose en la boca, la carne en su punto y finalmente la mayonesa. No sé, puro placer gastronómico. Si la hacéis, ya me contaréis que os parece.
¿Habéis comido algo así?
¿Qué os parece la idea?